L.C./D.F.
Alejandro Talavante abrió la puerta grande del coso de Alicante en su presentación en esta plaza al lograr dos trofeos en su primero de la tarde, mientras que Esplá y El Juli recibieron una oreja cada uno. Con respecto a los astados, de la ganadería de Jandilla, el ganado tuvo buena presencia, buen juego y alguno, entre ellos el primero y el último, sacaron su casta y con ese material desarrollaron su faena los matadores anunciados en el cartel. Indicar que el primero de la tarde procedió de la ganadería de Vegahermosa, cuyo propietario es familiar del ganadero de Jandilla.
Luis Francisco Esplá, después de un lanceo inicial y un puyazo, colocó tres pares de banderillas, recibiendo aplausos. Cogió la muleta y al toro, que no tenía mucha fijación, lo fue toreando dándole pases sueltos recorriendo casi todo el anillo, y al final, casi en la puerta de toriles, le pegó un bajonazo y se acostó. Esplá recibió dos avisos. Con el cuarto, después de una verónica y un puyazo alto, hizo un quite por chicuelinas, colocó tres pares de banderillas y lo brindó al público. Con pases por alto cogido a la barrera, el matador inició su faena, con dos tandas de derechazos buenos y unos no tan buenos por la izquierda con desplantes. Estocada, descabello y oreja.
El Juli, en el segundo de la tarde, lanceó rematando con media y revolea. A continuación, el astado recibió un puyazo. El matador inició su faena por alto hasta colocarse en el tercio de la plaza. Con derechazos y molinete sin ligazón y dos pases por alto, colocó al toro que recibió finalmente un pinchazo y una estocada que bastaron. Recibió aplausos. El quinto salió muy alegre, veroniqueando y rematando con una revolea, un puyazo y brindis al público. Casi en el centro del ruedo se colocó el diestro de rodillas, toreándolo por alto y después, siguiendo con derechazos muy bien ejecutados y templando, naturales, dos redondos, terminó con una gran faena. De remate le colocó una gran estocada. Una oreja. El público reclamó con insistencia la segunda oreja y el presidente, incomprensiblemente, le privó al Juli, de la misma.
Alejandro Talavante, en el tercer toro de lidia, pudo hacer su toreo gracias al astado que le tocó en suerte. El matador hizo el paseíllo desmonterado, ya que era su presentación en el coso de la Plaza de España. Empezó haciendo un quite completamente quieto, cuyos lances remató con una media muy buena, logrando muchos aplausos. Después de que el toro recibiese un puyazo, Talavante ofreció un quite de frente por detrás muy quieto. Al salir del mismo tropezó y cayó pero siguió con sus lances que le valieron una gran ovación. Tras brindar la faena al público, se colocó como una estatua en el centro del ruedo y recibiendo al toro desde la barrera, le hizo el pase cambiado y continuó con derechazos y naturales rematados con el de pecho de muy buena ejecución. Transportó al toro de un pinchazo hondo muy bien ejecutado. Dos orejas, lo que le abrió la puerta grande del coso alicantino. En su segundo, el sexto de la tarde, aunque el toro no tenía grandes resabios le hizo una faenita de pases aislados hasta que se quedó parado. Talavante concluyó con una estocada atravesada y caída, otro pinchazo y dos descabellos que le costaron dos avisos. Silencio.
Espectáculo para el jueves 21 de junio:
Corrida de toros.
Toros de la ganadería de Garcigrande y de Domingo Hernández Martín para Enrique Ponce, José Tomás y Francisco José Palazón.